El resultado del proceso de maquillaje fue estupendo, con algunos zombies que realmente daban algo de miedo...
Ya en la carrera, los zombies esperaban a los corredores a lo largo de todo el camino, ya que las reglas les prohiben correr. Para tratar de esquivarles, los corredores se agrupan para pasar rápido las zonas de zombies. El efecto "enjambre" hace que aunque algunos pierdan una vida, la mayoría pueda sobrevivir.
Para que no sea todo tan sencillo, hay que atravesar unos cuantos obstáculos: torres de pacas de paja, zonas con ruedas o piscinas de sangre...
Algunos de los zombies no solo daban miedo... ¿Que pasa si se explota una de estas verrugas purulentas?
A mitad de camino, unos juegos de tiro al blanco permitían recuperar vidas a aquellos que hubieran perdido dos o tres, para poder seguir jugando con algo de emoción.
Mas trampas y más zombies esperando. Los 5 kilómetros del recorrido se hacían muuuuuy largos.
Aunque al final, todos los corredores llegan a la meta (eso sí, no todos con vida...). Algunos de ellos deberían plantearse convertirse en zombies en proximas ediciones.
En todo caso, todos se consideran vencedores. El único objetivo era pasar una mañana divertida, y os puedo asegurar que el objetivo se supero con éxito.
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