martes, 15 de septiembre de 2015

Mis razones para usar Fuji

Ultimamente he tenido que explicar a un par de amigos qué me ha llevado a abandonar (prácticamente) mi canon 7D, y pasarme con armas y bagajes al mundo Fuji. Sin duda, ellos esperaban encontrar una razón técnica (que la hay), pero lo que mas les ha sorprendido son mis razones filosóficas...

En primer lugar, para los que no me veáis a menudo en acción, mi cámara más habitual es una Fuji X100s: una cámara de aspecto muy retro, que tiene una lente fija de 23mm/2 (equivalente a 35 mm si piensas en "cámaras de carrete"). Con ella viajo, y si sólo puedo llevarme un cuerpo de cámara, ese es el elegido. Si, por el contrario, puedo llevar un par de ellos en la bolsa, tengo también una Fuji X-e2 (a la espera de cambiarla por una X-Pro2, cuando salga al mercado) con tres objetivos: 56mm/1.2, 14mm/2.8 y 8mm/2.8 (este ultimo, manual de Rokinon).

Los lectores más avispados ya se habrán percatado de uno de los aspectos filosóficos: Cámaras pequeñas y discretas. Son cámaras que no intimidan: la gente normal no las ve como cámaras que podría llevar un fotógrafo profesional. Mi Canon 7D, con el 24-105, asusta bastante a los que creen que pueden salir en la foto. Les pone en guardia, y es difícil obtener una toma en la que salga gente con aspecto espontáneo, salvo que te alejes mucho. Y recordad a Robert Capa:

Si la fotografía es mala
es porque no estabas lo suficientemente cerca

Las dos cámaras tienen visor, ya sea óptico o electrónico (no todas las "réflex sin espejo" como se las llama por ahí, lo tienen), lo que hace que la forma de hacer fotos sea la convencional, acercándote la cámara a la cara, aunque también puedes usar la pantalla trasera. Yo la utilizo, fundamentalmente, cuando quiero dar un aire despreocupado a mi actitud fotográfica, pasando por un simple turista cuando hago fotos callejeras. El aspecto de la X100s es muy similar a la primera cámara que utilicé: una vieja Regula de mi padre como la que podéis ver en la imagen (tomada de camerawiki). Incluso teníamos una funda de cuero idéntica a la que tengo en mi X100s.

Además, y como consecuencia de su tamaño, mi espalda y mi cuello me agradecen enormemente la elección de estas cámaras...

El segundo aspecto filosófico es el uso de lentes fijas. Efectivamente, con mi cambio a Fuji, y después de estar unos meses utilizando SOLO la X100s, no sentí la necesidad de utilizar un zoom. Además mi experiencia con los zoom (al menos con los que yo me puedo permitir), es que su calidad no llega a las lentes fijas (por motivos de física básica). Si al leer esto piensas que no es así, te invito a que durante un tiempo largo (pongamos un mes) utilices sólo una lente fija (te recomiendo una focal de 35mm o 50mm equivalente a formato completo). Una vez que la tengas instalada y te pongas a hacer fotos, en lugar de quejarte por no tener el zoom, intenta buscar nuevas composiciones que puedes hacer con esa focal. El uso de focales fijas, te hace pensar más tu foto y, al menos en mi opinión, tener mejores resultados.

He dejado para el final los temas técnicos. Estas cámaras tienen una calidad muy buena, incluso superior, desde mi punto de vista, a mi Canon 7D. Cierto es que estamos comparando cámaras de diferentes años, pero estoy casi seguro que serán comparables con la 7D Mark II, que es la mejor cámara de Canon en formato APS-C.

Apenas se nota el ruido cuando disparas a ISO 3200 (un mínimo procesado en LR lo elimina perfectamente), y el modo de disparo con ISO automático es muy cómodo. Puedes fijarlo entre dos rangos de ISO (yo lo tengo entre 200, el mínimo, y 3200) y una velocidad mínima con la que quieres disparar (en la X-e2, tengo 1/125, porque utiliza cortinilla, mientras que en la X100s, es 1/60), aunque se qué velocidades mínimas puedo usar en cada cámara para disparar a pulso si el objeto no se mueve, sin que salga la foto trepidada: 1/40 en la X-e2 y 1/8 (si, 1/8, e incluso a veces 1/4) en la X100s. Si intentas usar esas velocidades en una réflex, las posibilidades de que la foto no salga trepidada son cercanas a 0.

De manera adicional, la calidad de las lentes es espectacular. El 56mm/1.2 es la mejor lente que he tenido nunca, y su precio, aunque no es bajo, es muuuuuucho más barato que una lente equivalente en Canon (al menos un 40% del precio...). Y os juro que no tiene un 40% de calidad. En fin, si estas pensando en comprar una cámara, dale una oportunidad a las Fuji. Creo que no conozco a nadie que se haya arrepentido del cambio...